jueves, 31 de octubre de 2013

Don Carlo (XV). Tras la tempestad llega la calma. Cuarteto bajo-barítono-soprano-mezzo.

Elisabetta entra turbada y pide justicia porque le han robado un cofrecito donde guardaba todas sus pertenencias. El Rey, con calma, se lo enseña porque fue él quien lo cogió y le pide que lo abra, y como ella rehúsa a hacerlo es él quien lo abre. Aparece, naturalmente, un retrato de su hijo y le pregunta a la Reina por qué lo guarda. Ella le recuerda que antes fue prometida de Don Carlo, y el Rey le llama adúltera. La Reina, sin fuerzas, cae desmayada, y el Rey pide socorro arrepintiéndose de su descontrol. Aparecen Éboli y Posa para ayudarla, y el Rey deja de sospechar de su adulterio por su manera de actuar. Éboli se lamente de haberla delatado, Posa considera que hay que tomar cartas en el asunto, mientras Elisabetta lamenta su vida, qué ha hecho para merecer esto.

Un cuarteto de excepción, sensacional, perfectamente compuesto y con las voces impecablemente integradas es el que hoy nos toca. Lo cantan el bajo Felipe II, la soprano real, la mezzo princesa y el barítono duque. Muy aristocrático todo, como la ópera que nos ocupa. Escuchad, escuchad.


Ghiaurov, Quilico, Freni, Bumbry. De 2.31.00 a 2.40.15.

Raimondi, Milnes, Caballé, Verret. La mejor versión de este cuarteto.


Ghiaurov, Waetcher, Janowitz, Verret


Siepi, Sereni, Jurinac, Cossotto