miércoles, 31 de julio de 2013

La Traviata (XIII). Germont padre se avergüenza de Alfredo. Gran final de acto.

Oh casualidad casualidad, aparece Giorgio Germont que lo estaba contemplando todo entre el público. ¿Qué pintaba Germont en la fiesta si no estaba invitado, además de algún cuadro? Se avergüenza de su hijo, del que dice que no lo ve, que ese no es su hijo, no es su Alfredo. Violetta pide que algún día se dé cuenta de su enorme sacrificio. 

Comienza cantando secamente el padre, para continuar con tristeza aunque en tono mayor, a lo que le sigue Alfredo arrepintiéndose con frases cortantes e incisivas. Violetta, pobre desdichada, dulcifica y pone en marcha el conjunto de este grandioso final de Acto II, en compás ternario, con frases largas y crecientes. Glorioso (en la segunda versión, claro).



Quede bien claro que Hampson me parece un mal cantante, y si pongo esta producción es por el buen hacer de la Netrebko y los subtítulos.


Sin embargo mi Traviata es ésta, con Milnes, Caballé y Bergonzi, a años luz de la anterior.

martes, 30 de julio de 2013

La Traviata (XII). Alfredo se desahoga. ¡Maroilles!

Alfredo juega a las cartas (aquí parece la ruleta por el reloj dando vueltas) con un grupo de invitados, mientras ve entrar a Violetta, como esperaba, acompañada del Barón Duphol, que también se une al juego para retar a Alfredo, pero éste gana todas las partidas. 

La cena está lista y tienen que posponer el juego. Violetta y Alfredo se quedan a solas, lo cual es aprovechado por ella para insistirle que la deje, que será mejor para todos. Él se enfurece, aún más si cabe cuando ella le comenta, falsamente, que ama al Barón, y aquí arde Troya: Alfredo llama a los invitados para que se enteren de la infidelidad de Violetta, para dejarla en ridículo (aunque seguían todos en París). No le pega pero sí le lanza billetes a la cara, generando el rechazo absoluto del resto de invitados.








Para esta violenta situación se necesita un queso con potencia, y ya que estamos en Francia os propongo el Maroilles, conocido como "viejo canalla". Corteza lavada amargo y áspero, con fuerza.

lunes, 29 de julio de 2013

La Traviata (XI). En la fiesta de Flora todo el mundo salía con unas cuantas copas de más

Menuda fiesta ha montado Flora en su casa. Gitanas, toreros, todo tipo de bailes y brindis, toda la nata y flor de la sociedad parisina, disfrutan y ríen como en una bacanal.

Alfredo, como comenté hace un momento, entró en la fiesta porque también estaba invitado, pero iba más bien para fisgonear y luego dejar en evidencia a Violetta, no tanto con la finalidad de pasárselo bien. Ya era noticia y se corrió el rumor de que Alfredo y Violetta se habían separado.


Dos escenografías distintas.

La famosísima y exitosa de Willy Decker estrenada en el Festival de Salzburgo. Personalmente tanta máscara pretenciosa y el tio vestido de Violetta increpando cuanto menos a Alfredo y burlándose de Violetta me parece no sólo fuera de lugar sino también propio de una película de terror.



Eeeeesto me gusta más. Cuenta con la "ventaja" de que está en formato película, firmada por Zeffirelli.
De 13.20 a 20.50.


La Traviata (X). Germont consuela a su hijo como puede y le dice que vuelva a casa, no sólo por Navidad.

Violetta le escribió la carta a Alfredo que ahora lee. Confirma a Flora que irá a su fiesta, cambiando de opinión, y abandona a Alfredo así sin más.

A Alfredo le llega la dichosa carta y la lee con desesperación e incredulidad. Tenía la intención de perseguirla para vengarse porque le ha dejado sin más explicaciones, pero el padre llega justo a tiempo para retenerlo y aplacarle los ánimos, "sugiriéndole" que retorne a Provenza, a su casa (donde me voy a ir la semana que viene precisamente). Casualmente Alfredo lee la carta de Flora invitándole a Violetta a la fiesta, lo que le hace pensar mal, creyendo que se ha ido con Duphol, su antiguo amante, y decide ir para allá a ver si les pilla en el ajo.

Aria de Germont padre, otro personaje secundario en la práctica que casi sólo aparece en el acto II. 
Verdi compone un aria y cabaletta atípicas para un barítono por lo líricas y tiernas, ya que no contienen en esta ocasión odio ni fuerza dramática ni ganas de vendetta. Incluso parece más escrita por Donizetti que por Verdi. Quizá Verdi lo ha hecho a propósito, el diseñarla con un estilo algo ya pasado, porque igualmente maduro es el personaje que la canta.


Bruson

Milnes

Zancanaro


Nucci, con piano, "improvisando"!

sábado, 27 de julio de 2013

La Traviata (IX). Violetta expresa sus más sinceras emociones

La interpretación y canto de las siguientes sopranos lo dicen todo. Escuchad y disfrutad.

Netrebko, sensacional, absolutamente creíble.

Callas, mítica en Violetta.

Caballé
http://www.youtube.com/watch?v=pZSsYgbRgwc

Scotto


Desde el Amami Alfredo hasta 1.08.20, sobre todo para la escena y los subtítulos.


La Traviata (VIII). Sigue el dúo suegro-nuera.

Continúa el hermoso dúo, partido en dos por su duración

¿Acepta Violetta la proposición del "suegro"?


Fijaos sobre todo en esos pianos de la Caballé a partir de 4.40, que va recogiendo y ampliando de manera única.
http://www.youtube.com/watch?v=stT5ZH6SNA4


A partir de 49.30 hasta 1.01.20


Siento no tratar La Traviata con más explicaciones porque estos días he estado bastante ocupado.

La Traviata (VII). El padre de Alfredo le pide algo a Violetta.

Se abre la caja de Pandora. Llega el padre de Alfredo, Giorgio Germont, a casa de ambos para hablar con Violetta, quien le enseña que va a vender todos sus bienes para poder mantener su vida con Alfredo, al que ama enloquecidamente. Él lo siente como una deshonra para su familia y le pide que haga un sacrificio, que deje a Alfredo.


Caballé y Milnes, 1967, puro caramelo.
http://www.youtube.com/watch?v=VlLEe9vw51U



Escuchar de 41.35 a 49.30. Subtitulada en español. Bonfadelli y Bruson, 2001

La Traviata (VI). Va de tenores

Alfredo y Violetta se han mudado a una gran casa de campo a las afueras de París. Alfredo está contento (y con-Violetta también), hasta que llega la sirvienta y le revela que Violetta está vendiendo sus joyas y demás bienes para poder seguir viviendo a lo grande. A Alfredo no le sienta demasiado bien, y se desahoga con una cabaletta, que no está mal pero comparando con otras tampoco aporta gran cosa. Alfredo, al lado de Violetta, es prácticamente un secundario.


Kraus, Alfredo.
http://www.youtube.com/watch?v=l9snQDxYOEY


Bergonzi, también Alfredo aunque se llame Carlo.



Pavarotti antes de ser famoso




Plácido, que no ha sido uno de sus personajes más cantados.



Alagna, que me da la impresión de que parece más un Duque de Mantua que un Alfredo.


martes, 23 de julio de 2013

La Traviata (V). Sempre libera! Violetta no se resigna. ¡Brie de Melun!

Violetta ya se ha repensado las cosas y concluye que quiere ser libre, ir de alegría en alegría, con nuevas pasiones que hagan volar su pensamiento. Pero en italiano suena mejor, naturalmente.

Es sin duda una de mis cabalettas verdianas favoritas, que es más para una soprano ligera, poco habitual en Verdi, que para una lírica o dramática. El tenor canta al final fuera de escena dos frases mientras Violetta colorea con su música.



1. Señores, esto es terreno Sutherland. La australiana ha llevado como estandarte esta cabaletta, siempre con su Mib al final, complicando tod en la medida de lo posible pero siempre de manera natural y exquisita. Aquí el tenor es Pavarotti.


La Caballé, en sus comienzos da lecciones en esta grabación aunque nunca haya sido considerada una soprano de coloratura propiamente dicha. Puede más que de sobra con ella, seduciendo siempre con sus modulaciones. No canta el Mib. El tenor es Bergonzi- A partir de 7.00


La Callas, con voz peculiar e interpretación única, arrasa con su Sempre Libera, con agudo final incluido.


Como es más territorio de ligeras, pongo el ejemplo de Luciana Serra, que si aquí bien se luce, habría que ver si llega bien de voz para el Acto II, más dramático hasta el punto de que parece otro personaje. A partir de 5.40


Un vídeo curioso que he encontrado que sobrepone úna versión de Sutherland con otra de Gruberova.



Ejemplo de soprano dramática, Leontyne Price, que bien la conocemos en este blog. Se nota que no es su terreno, aunque bien es cierto que hoy en día muchas quisieran cantar así de bien el Sempre libera.


Brie de Melun, muchos lo conoceréis, es el rey de los quesos franceses. Pasta blanda, suave, meloso, fresco. Siempre apetece. Se lo dedico a mi prima Almudena, que sé que le entusiasma el Brie de Melun.

http://www.mundoquesos.com/search?q=brie+de+melun

lunes, 22 de julio de 2013

La Traviata (IV). Violetta canta a la par que reflexiona. Aria.

Violetta trata de marear a Alfredo, aprovechándose de que está enamorado, con la operación de la flor (leed libreto abajo)

 


Violetta vuelve a la sala de baile y todos cantan a coro. Comparando una y otra escenografía parecen dos óperas distintas.


Aria primera de Violetta, con su recitativo, su cantabile y su cabaletta, bien amplia. Violetta relexiona sobre si ama o no a Alfredo, y para ello canta la melodía del dúo anterior, acompañada por el fagot.

Si hay un personaje con el que se le asocie a la Callas es Violetta, y quizá también a la inversa. Hay razones para pensar así, y si no las tenéis escuchad! Hasta 4.20


Físicamente nunca ha sido Violetta, por ello lo mejor es escucharla en CD, como éste. Su terciopelo seduce al corazón más frío. Voz impecable, segura, delicada, dominante. Hasta 6.10



Intachable Sutherland, inventándose trinos y agudos para lucirse aún más, siempre elegante y distinguida, limpia como una patena. Pero escuchémosla en la cabaletta en la siguiente entrada. Hasta 4.00


Anna Netrebko, traviesa y seductora, también impecable vocalmente, no tan inocente como podría ser Sutherland.


Ileana Cotrubas, más tierna y cándida, con algo de misterio. Hasta 4.10

y hay cientos...



GASTÓN 
(aparece por la puerta del centro) ¿Y bien? ¿Qué diablos hacéis?VIOLETA Bromeábamos...GASTÓN ¡Bien, está bien! Continuad...(se marcha) VIOLETA (A Alfredo) No más amor, entonces...¿De acuerdo?ALFREDO Os obedezco... Me marcho...(hace ademán de irse) VIOLETA  (ella retira una flor de su corpiño) Sí, así es.Coged esta flor.ALFREDO ¿Por qué?VIOLETA Vos me la devolveréis.ALFREDO (volviendo) ¿Cuándo?VIOLETA Cuando esté marchita.ALFREDO Mañana, entonces.VIOLETA Bien, mañana.ALFREDO  (acepta alegre la flor) Soy dichoso.VIOLETA ¿Pensáis todavía en amarme?ALFREDO  (alejándose) ¡Oh! ¡Cuánto os amo!VIOLETA ¿Os reís?ALFREDO  (volviéndose y besándole la mano) Me voy.VIOLETA Adiós.ALFREDO No deseo nada más.(sale) Escena Cuarta (Violeta y todos los demás vuelven de la sala acalorados por el baile). TODOS El día aparece en el cieloy debemos partir;gracias, encantadora dama, por una fiesta tan alegre.Toda la ciudad está en fiestas.Es la época de la diversión y la fiesta;debemos reposar ahora para reponer fuerzas en vista a otras noches de fiesta.(Ellos salen por la derecha)Escena Quinta VIOLETA  (sola) ¡Extrañas!...¡Extrañas!...¡Esas palabrasqueman mi corazón!Un amor verdadero ¿será una tragedia para mí?¿Qué vas a decir tú? Oh, turbada alma mía.Ningún hombre ha encendido mi amor...¡Oh, júbilo que nunca he conocido!. ¡Amar, ser amada!Esta alegría, ¿puedo desdeñarlapor los estériles sinsentidos de mi vida?¡Ah! Puede ser este aquelque mi almasola en el tumultoen secretoimaginaba amar.Aquel que vigilanteviene cerca de mí, enfermay enciende una fiebre nuevadespertándome al amor.A ese amor que es la inspiracióndel universo entero,misterioso y noblecruz y delicia para el corazón.

domingo, 21 de julio de 2013

La Traviata (III). Violetta se encuentra algo indispuesta.

Después del Brindis Violetta se encuentra pachucha, y no es acidez de estómago por tanto comer sino que le faltan fuerzas. Como no soy médico desconozco el porqué, aunque conozco bien el final y sé lo que le pasa. Esto en el XIX no se arreglaba con antibióticos porque no existían.

Se aparta de la fiesta a una habitación para intentar recuperarse y allí se queda Alfredo con ella a solas. Ella se muestra sorprendida de su presencia, y él le dice que va a cuidar de ella, que no puede llevar una vida así.

Fijaos que el recitativo está integrado en la escena, en la fiesta, que no deja de sonar hasta el dúo. La acción continúa, fluye. El dúo es bien corto y sin cabaletta, pero bien ligerito sobre todo para ella, exige algo de coloratura, una delicia verdiana.

Netrebko y Villazón, en el "recitativo"
http://www.youtube.com/watch?v=rkC1GKb_v2I

                                                      Caballé y Bergonzi


Callas y Kraus


(Se oye música de una sala contigua)

¿qué es eso?

VIOLETA
¿No queréis bailar ahora?

TODOS
Buena idea. Aceptamos con placer.

VIOLETA
Entonces, salgamos.

( se dirigen hacia la puerta del medio,
pero Violeta palidece de repente).

¡Oh!

TODOS
¿Qué os pasa?

VIOLETA
Nada, no es nada.

TODOS
¿Por qué os paráis?

VIOLETA
Salgamos...

(Ella da algunas pasos, pero no 
puede más y se sienta.)

¡Dios mío!

TODOS
¡Otra vez!

ALFREDO
¿Os encontráis mal?

TODOS
¡Oh cielos! ¿qué pasa?

VIOLETA
Estoy temblando; 
disculpadme e ir...

(señala el otro salón)

Yo iré en un momento.

TODOS
Como queráis

(todos pasan a otra sala menos
Alfredo que permanece dentro)

Tercera Escena

VIOLETA 
(mirándose en un espejo)
¡Estoy pálida!

(se da la vuelta y ve a Alfredo.)

¿Vos aquí?

ALFREDO
¿Os encontráis mejor?

VIOLETA
Me siento mejor.

ALFREDO
Os vais a matar
por vivir de esta forma...
Es necesario que cuidéis de vos misma.

VIOLETA
¿Y cómo podría hacerlo?

ALFREDO
Si estás junto a mí,
yo seré el guardián
de vuestra tranquilidad.

VIOLETA
¿Qué dices?
Nadie cuidará de mí.

ALFREDO 
(con ardor)
Es que nadie os ama en el mundo.

VIOLETA
¿Nadie?

ALFREDO
Nadie, salvo yo.

VIOLETA
(riendo)
Es verdad,
yo ya he olvidado un gran amor.

ALFREDO
¿Os reís?...¿no tenéis corazón?

VIOLETA
¿Un corazón?. Sí, tal vez.
¿Por qué me lo preguntáis?

ALFREDO
¡Ah!, si así es,
no podéis reíros de mí.

VIOLETA
¿Habláis en serio?

ALFREDO
No os engaño.

VIOLETA
¿Me amáis desde hace mucho?

ALFREDO
Desde hace un año.
Un día feliz, ligera
pasasteis junto a mí,
y desde ese día,
yo he amado sin el saber
de este amor que es la inspiración
del universo entero,
misterioso y noble,
cruz y delicia para el corazón.

VIOLETA
¡Ah! Si es verdad iros...
Solo puedo ofreceros una amistad pura
yo no sé amar y no puedo aceptar
su heroico amor.
Soy franca y sincera;
debéis buscaros otra.
Para entonces,
no os será difícil olvidarme.

sábado, 20 de julio de 2013

La Traviata (II). Fiesta y brindis

Violetta celebra una fiesta en su casa con la nata y flor de la sociedad parisina. Se presentan los Barones, Condes y otros recién llegados como Alfredo, introducido por Gastón a Violetta. Gastón le comenta que siempre se interesaba Alfredo por ella cuando estaba enferma. 




Callas y Kraus en la nunca olvidada Traviata del San Carlos de Lisboa allá por 1958!

Caballé y Bergonzi, gloriosamente juntos en este Brindis.


Dos escenografías bien distintas, opuestas, para que comparéis:
Esta más tradicional, lujosa, luminosa, con brillo, de la ROH de Londres en 1994, con la que dio el salto a la fama la conocida soprano rumana Angela Gheorghiou.

Quizá la producción de Traviata más mediática de las últimas décadas, con partidarios y detractores, es la que se estrenó en 2005 en Salzburgo, que también dio a conocer al mundo a Anna Netrebko y Rolando Villazón. Veis que es minimalista, "casual", van todos con traje...otro concepto. Fue el 2º DVD de ópera que compré

jueves, 18 de julio de 2013

19ª. La Traviata (1853). Amor y muerte.

La Traviata está basada en la primero novela y después teatro de Dumas "La dama de las camelias, estrenada en París en 1852. Verdi se inspiró cuando la vio y encargó a Piave un libreto sobre la obra de Dumas no exento de problemas.

La ópera fue estrenada en el Teatro La Fenice de Venezia el 6 de marzo de 1853. 

Todos podríamos pensar que, al igual que actualmente, las primeras funciones fueron un éxito. Al contrario, se calificaron de "fiasco". No tanto por la música sino por el poco interés y cualidades del reparto, que no captaron el significado de La Traviata, sin olvidar que el argumento era poco "moral" para el público de 1853, y esperaban otra cosa, el Verdi de toda la vida, "su" Verdi de caballeros con capa y espada y princesas en el castillo, con vendette y maledizioni. No obstante, la comprensión se fue adquiriendo progresivamente, y no fue hasta el año siguiente también en Venezia pero en otro teatro, con reparto ahora sí adecuado, cuando obtuvo su merecido éxito. Desde entonces jamás ha perdido vigencia, siendo la ópera favorita para muchos aficionados, no sólo verdianos, e incluso respetada por aquellos que no huelen a Verdi.
No suele suceder lo mismo, por ejemplo, con Trovatore, que por lo general genera entusiasmo entre el público más italianista.

Verdi pasaba buena parte de estos años en París con su pareja, la Strepponi, viendo mucha ópera y teatro, y esto le influyó como es obvio a centrarse en "La dama de las camelias". El libreto de Piave, protagonizado por una cortesana al principio hedonista que sólo buscaba amor (y lo que fuera menester) y después sacrificada en favor de las convenciones sociales, fue objeto de censura, la cual exigió que se representara ambientada en el XVIII cuando según Verdi era un drama absolutamente actual. También tuvo que cambiar el título en las primeras representaciones, porque "Traviata" (extraviada) era un término inmoral. 

La ópera contempla numerosas novedades:

-Es un drama bastante realista y burgués, que continúa la senda iniciada por Luisa Miller aunque aquí de manera más nítida y descubierta. Las fiestas que organizan Violetta y sus amigos podrían ser las mismas a las que en esa época asistiera el público en París o en otra capital europea, o incluso hoy día. 

- Hasta el momento, las muertes en la ópera se producían por homicidios/asesinatos, veneno, suicidio, locura...pero nunca por enfermedad como aquí.

- Más personajes secundarios y menos importantes, centrándose toda la trama en Violetta. 

- Escenas más integradas, con menos números cerrados como en Trovatore.

- Sustitución de la gran obertura por dos preludios, que ni siquiera existe en Trovatore, uno al inicio del Acto I y otro en el III.

Es considerada por algunos como la primera ópera "verista" (realista), de lo que discrepo, porque Verdi es verdiano, no verista. En todo caso los veristas, que llegaron después, se inspiraron en Traviata. Ojo.

Comparándola con óperas verdianas precedentes, Traviata está descompensada en cuanto a sus personajes. Es ella y lo demás. En Rigoletto, por ejemplo, el bufón es el protagonista pero sin evitar la fundamental presencia y el lucimiento de Gilda y del Duca. Es curioso que por otro lado Verdi "reequilibra" y redondea la trilogía, ya que si bien Rigoletto está protagonizado por un barítono, Trovatore por una mezzo y un tenor, Traviata por una soprano. Como es fácil de comprobar, aunque se considere una trilogía no hay conexión ninguna entre argumentos ni en música, cada una tiene un color diferente.

Se puede incidir en muchos más asuntos, pero creo que ya va bien por hoy, que llevo casi una hora leyendo y escribiendo. Fuente: http://jbgprada.blogspot.com.es/search/label/LA%20TRAVIATA

Preludio dirigido por Solti, gran verdiano, gran wagneriano, gran mozartiano... Todo lo dirigía a lo grande y con soltura!
Las cuerdas llevan la voz cantante con dos temas principales: la enfermedad de Violetta y el "Amami Alfredo", en el final de Acto II. 



miércoles, 17 de julio de 2013

Il Trovatore (XX). Ballet y discografía

Verdi tuvo que componer obligado unas escenas de ballet para el estreno del Trovador en París, porque todas las óperas allí representadas debían tener parte de ballet, por regla.


Afortunadamente abundantísima es la discografía de Il Trovatore, aunque difícilmente en el mercado discográfico encontremos una versión absolutamente redonda. Si nos ponemos tiquismiquis todas tienen algún defecto, siempre con subjetividad.

1. Azucena: Cossotto; Manrico: Plácido; Leonora: Price; Conte: Milnes. Dirige Mehta, 1970. Estudio. Reparto de gloria, sonido muy limpio, partitura completa con todas las cabalettas repetidas, un prodigio. El único "pero", si es que es un pero, es que Plácido tiene los agudos algo tirantes, y un Bergonzi, también con agudos no desahogados, sería el que redondearía el reparto. No se me entienda mal, Plácido está fantástico, aunque prefiero otros Manricos. La coloratura de la Price tampoco es la mejor. Las ventajas, más de las que os podáis imaginar. De escucha obligada.

2. A: Simionato: M: Corelli; L: Price; Conte: Bastianini. Dirige Karajan, 1962. Directo. El principal problema es el sonido y quizá la dificultad para frasear de Corelli. Price está bastante mejor aquí que en el 70. Por lo demás, el reparto tiene las cualidades ideales, con una dirección incisiva, enérgica, contundente. Genial. Falta la segunda cabaletta de Leonora.

3. A: Cossotto; M: Bergonzi; L: Stella; C: Bastianini. Dirige Serafin, 1963. Estudio. La Stella no tiene una voz bella aunque posee buen estilo verdiano y mediterráneo. Bergonzi manda aquí, sin dejar atrás a la Cossotto y a Bastianini. Ved como los repartos se repiten, ¡porque son los mejores en los 60, la década de óro para la ópera! La partitura no está completa, se cortan algunos compases. Sonido muy bueno.

4. A: Barbieri; M: Bjorling; L: Milanov; C: Warren. Dirige Cellini, 1953. Estudio. Sonido no tan bueno, reparto de primera, dirección correcta. No sabría destacar a ninguno de los 4. Quizá Warren. La tengo menos trillada.

5. A: Horne; M: Pavarotti; L: Sutherland; C: Wixell. Dirige Bonynge, 1975. Estudio. Muy distinta a las anteriores, es otro concepto de Trovatore. Más light, belcantista, descafeinada y elegante, se aleja a lo que uno espera de esta ópera, aunque resulta más que interesante por el reparto (salvo Wixell, fuera de estilo). Partitura estrictamente completa, con agudos prodigiosamente inventados, y con la música de ballet que nunca se toca.

6. A: Urmana; M: Licitra; L: Frittoli; C: Nucci. Dirige Muti, 2001. Directo, pero buen sonido. La grabación más corta nunca escuchada por la velocidad de los tempi, que impresionan. Destaca el reparto femenino, sin dejar de lado a Nucci. Pero el atractivo principal en este caso es la batuta. El tenor, recientemente fallecido, no canta nada mal pero no tiene nada que hacer frente a los 5 anteriores. Partitura completa, como siempre tratándose de Muti.

Hay muchos más y muy buenos. ¡Si queréis más información sólo tenéis que preguntarme!

Il Trovatore (XIX). Muere hasta el apuntador.

Los 4 protagonistas se unen para poner fin a este gran drama. En primer lugar aparece Leonora, recientemente envenenada, y Manrico se alegra en un primer momento. Ella viene directamente a liberarlo pero parece que le ha cogido el gusto al calabozo y no quiere salir, dice que desprecia su vida, y a Leonora que se vaya. Se plantea qué precio ha dado por la libertad y él mismo al verle la cara se responde, que el precio es ella misma. Le dice de todo "infame", aunque se va relajando. A todo esto Azucena al fondo seguía con su cancioncilla añorando los montes vascos. 

Vuelve la tensión. Manrico le pide explicaciones algo más desarrolladas, y ella le contesta que no está el horno para bollos, que va a ser que no, que se va a morir en breve por el veneno. Manrico ya desespera. Se despiden para siempre. Aparece por detrás el que faltaba, el Conde, que va a matar a Manrico incumpliendo su promesa. Lo mata, y la gitana que parecía que no se estaba enterando de nada sale enloquecida gritando al Conde que era su hermano, y que se ha vengado porque si no lo quemó en la hoguera, lo ha matado su propio hermano. Chan chan chan chan, chachán, chachán. (Sobre todo ahora en verano, que Torrevieja está bien llena)

¿No cuida Verdi la relación entre texto y música? ¿No tiene cada melodía su sentido? ¿No es Trovatore una de las óperas más exigentes? Y añado, ¿acaso no es la de melodías más bellas?




Que quede claro que tanto el tenor y el barítono no son de mis predilectos y que lo pongo porque tiene subtítulos en inglés, porque la escena se entiende, por el  reparto femenino y porque vi esa producción allí en NY. 





Con uno de mis repartos ideales: Bergonzi, Price, Cossotto, Cappuccilli, año 69. Lástima que no fuera grabada en estudio...Escuchar a partir de 2.00.00.

lunes, 15 de julio de 2013

Il Trovatore (XVIII). Azucena está a dos velas en el calabozo. ¡Cantagrullas!





















































En el calabozo donde se encuentran Azucena y Manrico, éste intenta consolarla para
que sufra lo menos posible. Dice que no puede dormir. Podría contar ovejitas, o directamente
tomarse un orfidal si la situación es extrema.




Zajic y Pavarotti.


http://www.youtube.com/watch?v=RwYP2r3Oi2c


Cossotto y Bergonzi, absolutos. Esta melodía la empleará Verdi para el final, que mañana escucharemos



Queso que acabo de comprar esta tarde: Cantagrullas Peral, de Valladolid. Cremoso, pasta blanda, sin el dulzor del Peñablanca, algo más amargo. Un espectáculo.




Escena Segunda

(Obscuro calabozo. A un lado hay
una ventana con barrotes. Puerta 
en el fondo. Un mortecino farol 
cuelga del techo. Azucena está 
echada sobre una manta. Manrique 
se sienta junto a ella)

MANRIQUE
Madre... ¿no duermes?

AZUCENA
Varias veces le he llamado
pero el sueño huye de mis ojos...
Rezo.

MANRIQUE
¿El aire frío 
te molesta quizá?

AZUCENA
No; de esta tumba de vivos 
sólo huir quisiera.
¡Siento que me ahogo!

MANRIQUE 
¡Huir!  

AZUCENA 
No te entristezcas;
quemarme no podrán los crueles.

MANRIQUE
¿Por qué dices eso?

AZUCENA
Mira... Su huella terrible,
ha estampado ya en mi frente
el dedo de la muerte.

MANRIQUE
¡Por favor!

AZUCENA
Encontrarán un cadáver mudo,
helado... más bien un esqueleto.

MANRIQUE
¡Por Dios, calla!

AZUCENA
¿No oyes?... gente se acerca...
Los verdugos son... 
quieren a la hoguera llevarme...
¡Defiende a tu madre!

MANRIQUE
Quienquiera que sea,
te lo aseguro, aquí no viene.

AZUCENA
¡La hoguera!
¡Palabra horrenda!

MANRIQUE
¡Oh madre!... Oh madre!

AZUCENA
Un día turba feroz a tu abuela 
llevó a la hoguera... 
Mira las terribles llamas 
¡La tocan ya! 
¡Ya le arde el cabello!
Y al cielo envía chispas.
Observa sus pupilas.
¡Fuera de las órbitas están! 
¡Ay! ¿Quién me libra 
de espectáculo tan horrible?

(Cae en brazos de Manrique)

MANRIQUE
Si me amas, 
si la voz de tu hijo
poder tiene sobre tu corazón,
detén los terrores del alma
olvido busca en el sueño 
y descansa en paz.

AZUCENA
Sí, el cansancio me oprime,
oh hijo...
Al sueño yo me entregaré...
Pero si de la hoguera arder ves
la horrenda llama, 
despiértame.

MANRIQUE
Reposa, oh madre. Dios conceda
la ausencia de tristes imágenes 
a tu sueño.

AZUCENA 
(Entre sueños)
A nuestros montes... volveremos...
La antigua paz... allí gozaremos...
Tu cantarás acompañado de tu laúd.
Con sueño plácido... yo dormiré.

MANRIQUE
Reposa, oh madre; 
yo devoto y mudo
el corazón al cielo volver.