Acto II
En el campamento romano, Ezio lee una orden del emperador (de Roma, no el pescado) que impone una tregua con los hunos y le ordena volver a Roma (cobarde).
A Ezio no le hace ninguna gracia que un muchachito recién llegado emperador le dé instrucciones (Guerrier canuto piegherà mai sempre Dinanzi a imbelle, a concubino servo? - ¿Un canoso y valiente guerrero doblegarse ante un
cobarde bastardo?).
Llega un grupo de hunos para invitar a Ezio a un banquete con Attila; se van pero uno de ellos de queda, ¿quién es? Foresto, que iba disfrazado (y no vienen de ahí los carnavales de Venezia)para pedir a Ezio que dirija un levantamiento contra Attila rompiendo la tregua. a foresto no le importa morir por Roma.
¡Por fin el aria de barítono, cuando el público ya tiene hambre de él! Ezio no tiene el protagonismo que muchos desearíamos, aunque algunas partes destacables como ésta. Necesitamos un auténtico barítono verdiano, brillante, con solera y ambición, además de habilidad para las partes líricas, un estilista nato, también con un seguro registro agudo.
Le tengo mucho cariño a esta aria, y más si cabe a la cabaletta, que la escucho y tarareo frecuentemente.
Nuestros más firmes candidatos son los siguientes:
1. Giorgio Zancanaro, barítono italiano sobre todo de los 80, muy vinculado a Muti y especializado en Verdi y verismo aunque también algún Donizetti. Creo que infravalorado, pues no tiene la fama de Milnes o Cappuccilli cuando sí podría estar en una posición cercana a ellos en cuanto a reconocimiento se refiere.
Físicamente parece un general romano auténtico, su italiano naturalmente es impecable, canta con tanto estilo como emoción sin contar por supuesto con los excepcionales medios vocales de Milnes, como veremos.
Recitativo hasta el 1.30, a partir de ahí el aria, y la deseada cabaletta comienza en el 5.30
2. Sherrill Milnes. No puede faltar, si ha cantado el papel, este rey de barítonos verdianos. Diría que es inferior a Zancanaro en cuanto a interpretación (no me hace creer que va a salvar Roma, adopta un perfil más bajo y tibio) al mismo tiempo que superior en voz y estilo. Atención, el Foresto aquí es Carlo Bergonzi!!
3. Piero Cappuccilli. Adjunto una grabación espectacular del 80 en directo en Viena, donde no pudo resistirse a bisar la cabaletta ante el delirio y desmayo de los tifosi. Claro, además de cantarla como nadie, elmuy bravo se atrevió con un Si bemol no escrito, difícilmente alcanzable para un barítono. ¡Esto sólo pasa enla ópera!
Dagli immortali vertici Belli di gloria, un giorno, L'ombre degli avi, ah, sorgano Solo un istante intorno! Di là vittrice l'aquila Per l'orbe il vol spiegò... Roma nel vil cadavere Chi ravvisare or può? Chi vien? Scena Seconda (Preceduto da alcuni soldati romani presentasi uno stuolo di schiavi di Attila) CORO Salute ad Ezio Attila invia per noi. Brama che a lui convengano Ezio, ed i primi suoi. EZIO Ite! Noi tosto al campo verrem. Scena Terza (Tra gli schiavi che partono uno è rimasto. Egli è Foresto) EZIO Che brami tu? FORESTO Ezio, al comune scampo Manca la tua virtù. EZIO (sorpreso) Che intendi? Oh, chi tu sei? FORESTO Ora saperlo è vano; Il barbaro profano Oggi vedrai morir. EZIO Che narri? FORESTO Allor tu dei L'opera mia compir. EZIO Come? FORESTO Ad un cenno pronte Stian le romane schiere; Quando vedrai dal monte Un fuoco lampeggiar, Prorompano, qual fiere, Sullo smarrito branco! Or va... EZIO Di te non manco; Saprò vedere, e oprar. (Foresto parte rapidamente) Scena Quarta EZIO È gettata la mia sorte, Pronto sono ad ogni guerra; S'io cadrò da forte, E il mio nome resterà. Non vedrò l'amata terra Svenir lenta e farsi a brano. Sopra l'ultimo romano Tutta Italia piangerà.
En español
¡Ojalá un día, las sombras
de los inmortales antepasados
surjan de sus tumbas gloriosas
y me rodeen al menos un instante!
La victoriosa águila volará, de nuevo,
por todo el orbe.
Mas ¿quién puede reconocer a Roma,
en ese vil cadáver?
¡Alguien viene!...
Escena Segunda
(Precedido de soldados romanos
se presenta un grupo de esclavos
de Atila.)
CORO
¡Aecio, Atila te envía,
mediante nosotros, saludos!
Desea que con él se reúnan
Aecio y sus capitanes.
AECIO
¡Volved!
Hoy mismo iremos al campamento.
Escena Tercera
(Tras los esclavos que salen, uno
se retrasa. Se trata de Foresto.)
AECIO
¿Qué quieres tú?
FORESTO
Aecio, para la causa común
es necesario tu valor.
AECIO
(sorprendido)
¿Qué oigo? ¿quién eres?
FORESTO
Aún no es necesario que lo sepas;
el bárbaro profanador
hoy verás morir.
AECIO
¿Qué dices?
FORESTO
Para ello tú debes
la obra completar.
AECIO
¿Cómo?
FORESTO
Que estén preparadas
las escuadras romanas
y cuando veas en el monte
un fuego brillar,
¡irrumpid como fieras,
sobre la confusa manada!
Debo irme...
AECIO
No fallaré;
sabré ver y actuar.
(Foresto sale rápidamente.)
Escena Cuarta
AECIO
Mi suerte está echada,
estoy preparado para la guerra.
Y si caigo, caeré como un héroe,
mi nombre no se olvidará
y no veré a la amada tierra
languidecer lentamente.
¡Por el último romano
toda Italia llorará!
No hay comentarios:
Publicar un comentario